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El Suregranca se vino de vacío a la Isla, después de dejarse el alma en la cancha, ante un Grucal Adesal Córdoba más experimentado.
El partido comenzó con un Grucal Adesal imponiendo un ritmo alto de partido, lo que le llevó a tener ventaja en el marcador desde el primer minuto. El conjunto Andaluz ganaba ya a los 5 minutos por un claro y contundente 4-0. Resultado, fruto del buen quehacer de su jugadora Espe López que mandaba y comandaba a las suyas sobre el parque, lo que hizo que Antonio Álamo decidiera hacer una mixta para parar la sangría que la jugadora fuensantina.
Y así fue, las Grancanarias se pusieron el mono de trabajo, apretaron en defensa y a base de trabajo y sufrimiento, consiguieron ponerse 14-13, con un gol de Beatriz Gonzalez que volvió a cuajar un excelente partido, anotando esta vez, siete goles.
Pero decisiones muy discutibles de los colegiado andaluces, dieron al traste con esa reacción ya que sacaron nuevamente a las chicas de Álamo del partido y volvieron a hundirse y llegar casi sin aliento al final de la primera parte con el resultado adverso de 18-13.
En la segunda parte, las andaluzas, con la traquilidad que da los cinco goles de diferencia y una mas que discutida labor arbitral a su favor, se dispusieron a apretar en defensa y a jugar con las prisas y ansiedad de las canarias que hacía lo indecible para acercarse en el marcador, cosa que no sucedería ya que el Grucal Adesal salía con rapidez al contraataque aprovechando los errores en ataque del Suregranca.
Al final el marcador de 33-24 que por lo visto en el 40x20 es excesivo, máxime por el derroche f´sico de las canarias.
A pesar de la derrota, los técnicos sureños sacaban una buena lectura del partido, donde las chicas del Suregranca, a pesar de haber perdido, dieron la cara y siguen creciendo.
Ramón Acosta
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